Carmen Azparrent: libertad inmediata !!
Sabia de Fermín Azparrent desde la época universitaria, era el alcalde de Ayacucho en la época del terror, representando a Izquierda Unida. Militante del Partido Comunista Peruano. Su asesinato a manos de sendero luminoso fue un duro golpe para todos los comunistas. Conocí a Carmen Azparrent hace menos de un año en un evento de la CGTP Junín, es una mujer sencilla y dulce que colaboraba con el evento llevando comida para los asistentes. Conversé con ella, especialmente sobre su padre. Luego la he vuelto a ver en otros eventos de la CGTP. En toda oportunidad me ha quedado claro su compromiso con la izquierda y su rechazo al terrorismo. Ella ha sido detenida al regresar al Perú, por participar en un evento izquierdista en Quito, en el II Congreso de la Coordinadora Continental Bolivariana junto con otras seis personas más.
Su detención ha sido presentada así:
Lo que queda claro aquí, es que este hecho es parte de una respuesta a las protestas regionales. Una acción punitiva. Un simple acto de venganza del gobierno contra las organizaciones izquierdistas. También es un abuso completamente ilegal, detener y presentar públicamente a ciudadanos como si fueran delincuentes sin ninguna prueba verosímil. ¿Volverá a ser esto una práctica habitual? Ya muchos se han pronunciado sobre esta injusta detención.
- Blog Melissa Libertad
- Poetas demandan libertad de detenidos
- Libertad para Carmen Azparrent
Hay un debate muy interesante sobre los detenidos y especialmente sobre la poeta Melissa Patiño en el blog de Gustavo Faverón.
Y la convición de que alguien es inocente debe de ser más que suficiente para pedir su liberación, Carlos. Lo que no se puede hacer es basar el pedido en la pura amistad, la simpatía y, menos aun, el hecho de que alguien sea o no sea un escritor, como está ocurriendo lamentablemente con el caso de Melissa Patiño. Lo que me parece crucial es que la gente vaya más allá y haga notar que si hay violación o abuso de la ley en un arresto (no estoy seguro de que este sea el caso, pero podría ser), se debe exigir siempre una explicación y el castigo contra los responsables.
ResponderEliminarEl que puedan haber ex emerretistas en el grupo de Carmen Azparrent y Dante Castro no lo convierte automáticamente en un grupo criminal, al contrario de lo que opinan los fachos de El Comercio. Para caracterizar como criminal a un grupo político debemos, ante todo, tomar en cuenta la naturaleza de sus acciones.
ResponderEliminarLa "investigación" de El Comercio (que algunos macartistas asumen como verdad evangélica) está llena de documentos de dudosa procedencia y suposiciones que no podrían ser admitidas jamás como evidencia por un tribunal de justicia de un país civilizado, además de que revela la presunción de culpabilidad que maneja la Policía como hipótesis, en contra del más elemental sentido de justicia.
Es cierto que es un error peligroso y abusivo llamar terrorista a alguien cuando tal caracterización no se justifica. No menos absurdo es llamar macartistas o fascistas a los periodistas de El Comercio. En ambos casos se está usando el lenguaje de manera caricatural y, por lo tanto, empobrecedora para el debate.
ResponderEliminarPero por lo que leo en el comentario de Ricardo alvarado, no se señala como macartistas a los periodistas, sino a otros que asumen una mala investigación como prueba suficiente dentro de una campaña que si parece tener mucho de macartista.
ResponderEliminarAcusar de macartistas o fascistas a algunos periodistas El Comercio es ciertamente absurdo, mas no es una criminalización como la que hacen esos mismos periodistas cuando acusan de terroristas a diversas personas. Por terrorista te meten primero a la cárcel y después investigan; por macartista o fascista, no pasa nada poque estás ejerciendo tu derecho a la libre expresión.
ResponderEliminarDesde que se terminó la "primavera" de la CVR y se iniciaron las movilizaciones sociales, El Comercio ha asumido una posición cada vez más intolerante respecto a los movimientos de izquierda. Desde entonces, la bandera del anticomunismo militante dejó de ser patrimonio exclusivo de "La Razón", "Correo" y "Expreso".
ResponderEliminarDesde entonces, todas las semanas, Los elementos del macartismo como discurso político están en las páginas del "decano": denuncias basadas en testimonios sesgados, supuestos planes maestros para desestabilizar el país, listas negras contra sospechosos de "comunismo", conexiones clandestinas entre los movimientos sociales y las FARC... sólo falta el "oro de Moscú".
Y en esta esforzada labor, el "decano" juega en pared con la DINCOTE, el Ministerio del Interior y la DEA. Si eso no es macartismo, ¿qué es?
Bueno, Silvio, pero si la cosa va a ser quién hizo la acusación menos absurda, o quién lanzó la piedra un poquito menos arbitraria, creo que estamos poniendo la vara muy abajo, ¿no?
ResponderEliminarCarlos: como puedes ver, Ricardo Alvarado sí llama macartistas y fascistas a la gente de El Comercio; yo no había leído tan mal después de todo.
No es un problema de lectura, Gustavo. Pero estás eludiendo el fondo del asunto: el rol jugado por El Comercio dentro de esta histeria anticomunista (hacer la acusación y exigir la actuación de la Policía y los juzgados).
ResponderEliminarAntes, el papel de acusador anticomunista público era asumido exclusivamente por "La Razón", "Correo" y "Expreso"; ahora, las listas negras también salen en El Comercio. Si lo hacen de buena fe o si se dejan engañar por la DINCOTE da lo mismo; ya los acusados quedaron estigmatizados.
Gustavo,
ResponderEliminarambas son absurdas y arbitrarias, ni más ni menos, pero no están en el mismo nivel como tú las pones. No es un tema de bajo sino de diferente nivel de gravedad en la acusación.
Una, la de TERRORISMO, te criminaliza y tiene la consecuencia práctica de que te ponen en prisión. Preferirán equivocarse perjudicándote a ti, que dejándote ir libre. Las sospechas caen sobre ti (sobre todo si aplicamos tu lógica extrajurídica) y asi salgas libre ya te arruinaron. Te quedas con el estigma de terrorista, no importa que siempre hayas sido inocente.
La otra no lo es. No te van a encarcelar por una acusación de macartismo o fascismo.
Incluso en los países de la Unión Europea donde ciertas expresiones del fascismo están criminalizadas (la negación del holocausto, el uso de símbolos nazis, la creación de partidos ilegales, etc.) esta criminalización se refiere a actos delictivos concretos, no a las creencias.
ResponderEliminarSi hubiera una legislación similar en el Perú, los primeros en ser juzgados y condenados serían los plumíferos de "La Razón" y "Correo", por su apología de las dictaduras, su racismo militante y su defensa cerrada de autores de crímenes contra la humanidad.
Efectivamente, una cosa que nos ha dejado sendero luminoso y la guerra interna, ha sido esta idea de que "pensar es peligroso" y que "opinar es un delito". En general, entiendo que post 11 de setiembre, esto se convierte en una tendencia mundial. Valdría la pena preguntarse si debe ser asi. La parte más complicada como señala Ricardo y Silvio la tienen los izquierdistas. Pues ahora, por arte de magia, ser de izquierdas casi casi es sinónimo de ser terrorista. El Opus Dei es al cristianismo como Sendero al marxismo, pero Rafel Rey es ministro de Estado.
ResponderEliminarLos periodistas de El Comercio responden a la misma moral política conservadora que rige a casi toda la clase media limeña, y Rafael Rey es un cucufato hipócrita y un papanatas. Pero eso no hace a los primeros fascistas ni hace a los miembros del Opus Dei genocidas equiparables con Sendero Luminoso. Como digo, con ese tipo de analogía descabellada la conversación no tiene sentido.
ResponderEliminarAlberto Adrianzén, en La República de hoy sábado, aporta algunos elementos a la discusión. Ver:
ResponderEliminarhttp://www.larepublica.com.pe/content/view/209519/481/